Bien sabemos que el mercado está plagado de juegos en primera o tercera persona, son más comunes ya los juegos de este tipo, y a veces hasta cuesta trabajo diferenciarlos.
Pero al parecer algunos están esforzándose por marcar las diferencias. Tal es el caso del juego Tom Clancy’s The Division.
Hace unos días, tuvimos la oportunidad de jugar la beta cerrada, elegimos Xbox One, debido a que iba a estar disponible un día antes que las demás plataformas, a saber, PlayStation 4 y PC.
Comparando después, parece que ni hay muchas diferencias entre las versiones, y eso es algo bueno, pues habla bien del equipo que ha programado el juego.
Al principio podemos crear a nuestro personaje, tomando la clásica ruta de, es hombre o mujer, y poniendo ciertas facciones y características para diferenciarlo de los demás, una parte que en lo personal, nos angustia un poco, pues para dejar al personaje perfecto a veces tardamos HORAS en este paso.
Después de elegir con calma, empezamos la aventura, en un mundo caótico y con sólo un poco de esperanza, ubicado en un futuro no muy lejano, en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos.
Quienes hayan viajado a esta ciudad, van a reconocer muy fácil las calles, pues el juego es fiel a la ciudad de la vida real. Esto le da un punto extra de inmersión a la experiencia.
No hay que olvidar que el juego es un RPG, esto es, vamos a poder ir equipando y subiendo de nivel a nuestro personaje, lo que abre una ventana de posibilidades muy amplia, y nos mantendrá ocupados por mucho tiempo.
La historia nos capturó de inmediato, y detalles chuscos como las PCs que encontramos con «pantalla azul de la muerte» nos divirtieron y nos hacen sentir que a este juego se le ha puesto atencion especial a los detalles pequeños, lo que muchos ya no hacen, pues la moda es ir sacando los juegos al vapor.
The Division se siente como un juego robusto, en varios aspectos.
Aunque se trata aún de un beta, un juego en desarrollo, no encontramos fallas evidentes que nos hagan pensar que aún le falta al juego mucho trabajo por terminar. El manejo del personaje está muy bien explicado, y hasta cierto punto es intuitivo qué hace cada botón. Los personajes no jugables que están alrededor, reaccionan de forma natural y de la manera que se espera. Y qué decir de los enemigos, ya que nos costó algo de trabajo eliminarlos en varios casos, lo que nos obliga a utilizar el sistema de ocultarse tras los obstáculos que tiene el juego. Si bien no vamos a tener tanto exito si salimos disparando como locos, tampoco el juego es tan táctico. Podemos decir que se encuentra en medio de los dos mundos, o que es bienvenido para un rango amplio de jugadores que buscan tanto un tipo de jugabilidad como el otro.
Nos quedamos con ganas de conocer el resto de la historia, al completar las misiones de la Beta, pero nos enteraremos del resto hasta el estreno del juego.
No cabe duda que The Division será uno de esos juegos de los que se estará hablando, por lo menos, por el resto del año.